Lola Núñez y Rocío Antón: cómo nació Sherlock Tópez a cuatro manos

Lola Núñez y Rocío Antón son escritoras, maestras y educadoras. Además, son amigas y les gusta mucho trabajar juntas. De esta fructuosa colaboración han nacido personajes tan entrañables como Sherlock Tópez, un pequeño topo detective que resuelve misteriosos casos para mantener la convivencia pacífica de los animales. Hablamos con ellas para conocer más en profundidad su proceso de trabajo y que nos presenten Los casos de Sherlock Tópez, la colección para primeros lectores con letra ligada y pictogramas que ya está disponible en la Biblioteca Ta-Tum junto a otro de sus trabajos: Cuentos del viejo roble.

 

¿Cómo definiríais Los casos de Sherlock Tópez para aquellos lectores que no los conozcan? 

Es una colección de libros en los que la amistad, la curiosidad y el cuidado de la naturaleza son los ejes fundamentales. Las aventuras, llenas de fantasía y humor, se entrelazan con informaciones y datos reales sobre el entorno natural. Además, Sherlock Tópez adora leer y es un magnífico ejemplo para que los jóvenes lectores se acerquen con interés y curiosidad a los libros, con los que pueden disfrutar y obtener información. 

Al plantear las historias nos interesaba que el humor y la sorpresa estuvieran presentes en cada una de ellas. Tópez anima a niños y niñas a explorar, a convivir y a ser responsables con su entorno.

 

¿Cómo nació este simpático personaje?

Las dos somos maestras de formación y educadoras de vocación y de profesión. En todos nuestros libros, de forma natural, incluimos valores y aprendizajes para la vida. En esta ocasión, estábamos interesadas en tratar el asunto de los investigadores y el cuidado de la naturaleza.

Buscábamos un protagonista que conectara emocionalmente con los lectores. De repente, surgió el nombre de Sherlock Holmes y, de inmediato, Sherlock Tópez vino a nuestra cabeza; un topo investigador, algo cegato, muy próximo al mundo infantil y alejado de los estereotipos de los investigadores tradicionales. Así empezamos a construir este personaje, entrañable, curioso y muy, muy listo.

Soléis escribir juntas y esta colección la habéis creado entre las dos. ¿Cómo es la tarea en la práctica? 

Esta es una pregunta que nos hacen con frecuencia y, aunque intentamos responder, no sabemos si queda clara nuestra explicación. Cuando escribimos siempre estamos juntas, no nos repartimos el trabajo y la escritura es fluida. Hablamos mucho, corregimos mucho, damos infinidad de vueltas a los textos y disfrutamos creando historias para nuestros lectores. También reímos, nos asustamos o nos preocupamos con nuestros personajes. Escribir juntas es un festival de emociones. 

Nuestras ideas en relación con la literatura infantil son muy similares y nos resulta fácil y divertido el proceso de trabajo. Siempre hemos pensado que la escritura a cuatro manos enriquece nuestras obras.

¿Qué ventajas e inconvenientes tiene escribir juntas?

Siempre tenemos la sensación de que un escrito así es mucho más «redondo» que una obra individual, aunque también escribimos de forma separada. La doble perspectiva nos ayuda a ver todos los enfoques posibles de la historia y hace que nuestros textos tengan muchos más matices.

En cuanto a los inconvenientes, podríamos decir que lo peor es no poder trabajar juntas físicamente más veces, pero, últimamente, lo subsanamos gracias a las tecnologías.

 

Cada título de Sherlock Tópez convierte en un misterio las grandes habilidades de los animales. ¿Podéis darnos dos ejemplos de curiosidades que vayan a aprender los más pequeños con estos libros?

En todos los libros de esta colección incluimos información sobre los animales y el entorno. Hemos cuidado la ambientación en las diferentes estaciones del año para contar datos curiosos sobre la naturaleza en esos momentos: la hibernación de los osos, el nacimiento y la metamorfosis de la rana, los huevos «intrusos» de cuco en los nidos de otros pájaros… Y así en todos estos libros. Además, al final de cada historia se incluye una página con más información sobre el animal que ha compartido la aventura con Sherlock Tópez.

 

Además de los misterios de la naturaleza, ¿qué valores aprenden los peques con estos libros?

Los valores fundamentales que impregnan la colección son la amistad, la curiosidad, el respeto por el entorno natural y por la diversidad; asimismo, insistimos en la importancia de la lectura y el disfrute que supone leer y compartir lecturas.

 

Sabemos que es muy difícil elegir pero… ¿tenéis una historia favorita de Sherlock?

Nos resulta muy difícil elegir una, porque estamos convencidas de que todas ellas son especiales por una u otra razón. A la hora de decidir qué cuento contamos cuando estamos frente a nuestros lectores, elegimos un título u otro en función del grupo de niños y niñas que formen nuestra audiencia. 

Sabemos que también os gusta contar cuentos. ¿Qué creéis que puede aportar a los pequeños detectives leer Los casos de Sherlock Tópez en voz alta, en el aula? ¿Y en casa, en familia? 

Las dos contamos nuestras historias con frecuencia. Estamos convencidas de que la lectura en voz alta es una de las actividades más placenteras para los mayores y los pequeños. El momento de la lectura, en el aula y en la casa, es mágico, cargado de fantasía y de intimidad; lo afectivo se convierte en protagonista y en elemento motivador. 

Desde un punto de vista educativo, sabemos que las historias compartidas son vehículos para la transmisión de valores y aprendizajes, y proporcionan modelos y respuestas para afrontar diferentes situaciones de la vida; además, contribuyen a instalar en los peques los hábitos lectores.

 

Sois las autoras de la colección Cuentos del viejo roble que también está inspirada en la naturaleza y sus secretos. ¿Elegís este tema porque os gusta? ¿Cómo os documentáis para todas las curiosidades que contáis en vuestros cuentos?

Tenemos un gran número de libros que abordan el tema de la conservación del entorno natural desde diferentes enfoques. Cada vez vemos más necesario llamar la atención sobre este asunto. Conocer la naturaleza, detenerse a observarla y a disfrutar de lo que nos rodea, y valorarlo en su justa medida es imprescindible en la actualidad. 

Tenemos la esperanza de que estas historias contribuyan a que nuestros lectores se conviertan en adultos sensibles, responsables y activos en la tarea de mejorar nuestro planeta (desde todos los puntos de vista).

 

Sherlock es un pequeño topo detective y Ta-Tum invita a los pequeños a convertirse en investigadores. ¿Cómo os gustaría que se usaran vuestros libros en las aulas? 

Nuestros libros están pensados para ser disfrutados de mil maneras. La idea es que los lectores puedan manipularlos, leerlos y descubrir mil detalles que se encuentran en sus textos, sus pictogramas y sus ilustraciones. Nos encantaría que Sherlock Tópez fuera una referencia para animar a los pequeños investigadores a mostrar su curiosidad y a satisfacerla, explorando el entorno, buscando respuestas y compartiendo experiencias. 

 

Y, por último: ¿algún consejo para los docentes?

Estas historias pueden ser un buen punto de partida para la realización de pequeñas investigaciones, proyectos o juegos dramáticos. La riqueza de los elementos que tratan permiten estos y muchos otros aprovechamientos.

 

¡Esperamos que sea así! Muchísimas gracias, Lola y Rocío, por compartir vuestra experiencia.